No está este espacio pensado para hacer valoraciones sobre los resultados, pero sí lo está para valorar la comunicación de personas, entidades, instituciones etc. En cualquier caso, quede claro mi deseo de una España unida y constitucional (sea cual sea la Constitución que soberanamente se otorgue el pueblo español).
Vamos al asunto.
La noche de las elecciones catalanas seguí atentamente las comparecencias de los diferentes líderes políticos y, una vez más, me sorprendió alguna puesta en escena. En algún caso pareciera que a algunos les pilló de improviso. No me lo podía creer. Otros, sin embargo, conscientes de la importancia que un día (noche) como ese tiene, la cuidaron al detalle.
"Juntos por el sí", independientemente de la valoración de los resultados, de si la victoria cumplía o no las expectativas, incluso al margen del lío que se les avecinaba para formar un gobierno estable en la Generalitat, siguieron con su hoja de ruta, es decir, más leña, más movilización, más fiesta por la independencia.
Ciudadanos, exultantes por el resultado (lógico) tampoco dejaron nada a la improvisación. Sonrisas, caras amables, mensajes claros a sus votantes (en castellano) y a aquellos que optaron por el voto que representaba el independentismo (en catalán). Gritos de los asistentes reivindicando la españolidad de Cataluña...
Pienso que las puestas en escena, sin ser definitivas (casi nada en comunicación lo es), deben cuidarse al máximo porque sus imágenes pueden dejar huella en el subconsciente del elector.
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