jueves, 7 de agosto de 2014

Informar también exige responsabilidad: "ébola"

Aunque estos días de estío dan más para leer que para escribir, no puedo resignarme ante lo visto hoy con motivo del asunto "ébola" en España. Ha sido como si, de repente, por el sólo hecho de estar comenzado el mes de agosto se hubiese esfumado la responsabilidad a la hora de ejercer la comunicación institucional de gobiernos, oposiciones y medios de comunicación.
Antes de seguir, quiero hacer salvaguarda del único periódico que ha hecho gala de máxima responsabilidad en un momento de "crisis", titulando como se debe titular: "España cumple con su deber". Porque eso es lo primero que habría que haber trasladado a la opinión pública española, antes incluso de hablar si el avión en el que repatriamos a dos españoles (sean o no religiosos), es el de Rajoy o un Hércules, si se desaloja una planta o un hospital entero o si hay un suero con nicotina capaz de frenar el ébola (titulares de El Mundo, El País y La Razón).
En situaciones de crisis tan sensibles como las que tienen que ver con la salud, que ponen en vilo a toda una nación, hay que ser responsables. Explicando con serenidad y honradez lo sustancial. Y lo sustancial aquí, y en primer lugar, es que el Gobierno de España y el Estado español, tiene la obligación de repatriar a sus nacionales en situaciones de este tipo. Luego, además, hay que tranquilizar a la población y explicar, a los medios de comunicación antes que a nadie, las cuestiones técnicas del operativo, para que nadie cometa la irresponsabilidad de hablar a "humo de pajas" en tertulias y magazines de verano.
Para lograrlo, no es suficiente que el Gobierno hable, el mismo día del traslado de nuestros dos misioneros, por boca de una Directora General del ministerio de turno, ni mucho menos es suficiente la voz de un consejero de comunidad autónoma. ¿Ha sido fruto de la fecha veraniega?, no lo creo.
Los titulares de los periódicos, en su línea, buscando el perfil más idóneo para incrementar la recaudación. Y lo de permitir todo tipo de imágenes sobre los preparativos del avión... de nota. Verlas tranquiliza muchísimo (¿?).
Ni que decir tiene, que menosprecio a cuantos además de torpes, han intentado rentabilizar políticamente este asunto, como algún sindicato y algún/a político/a de tres al cuarto queriéndose hacer oír en el desierto informativo del mes de agosto.
Hay cuestiones en comunicación, que por ser de Estado, son relativamente fáciles de llevar a la práctica. Al parecer, hoy, salvo ABC, el resto no hemos sido capaces. Una vez más se ha echado de menos valentía y altura de miras.