domingo, 2 de diciembre de 2018

¿Hay discursos indecentes?


Resultado de imagen de susana diazEvidentemente no. Los discursos pueden ser buenos, malos o indiferentes. Los discursos pueden contribuir a la comunicación eficaz (o no) pero nunca son indecentes. Lo indecente puede ser los mensajes que transportan esos discursos como herramienta para convencer, disuadir o persuadir a quien los escucha.                                                                                   A la vista de lo ocurrido en las elecciones andaluzas, (2.600.000 ciudadanos con derecho a voto no se han acercado a las urnas), parece que el conjunto de los discursos han sido poco claros, nada creíbles y ausentes de emoción. En función de los resultados, parece evidente que ha habido algunos discursos más persuasivos que otros.

He seguido atentamente la campaña y los discursos de la misma estos días (es mi obligación). Y también la noche electoral. Y lo que nunca pensé fue que iba a escuchar un discurso que trasladara mensajes indecentes en boca de líderes políticos a la hora de hacer las valoraciones de los resultados.
Escuchar con tono de supremacía moral, aunque su lenguaje no verbal fuera un poema, a Susana Díaz y al propio Ábalos cómo han repetido el concepto de extrema derecha refiriéndose a Vox y lo han situado en el foco para pedir patéticamente un cordón sanitario, me ha indignado.

La política debe ser practicada con nobleza. El discurso, la palabra, debe utilizarse con arte. Legítimo es el esfuerzo de persuasión y convencimiento, pero sin manosear las ideas.

Quien milita en un partido que se mantiene en La Moncloa con el apoyo de independentistas, terroristas y anti-sistema no posee fuerza moral para pretender estigmatizar como extrema derecha anticonstitucional a quien no lo es y cuenta entre sus militantes a Ortega Lara. Y eso sí, como siempre, sin una sola autocrítica. ¿Acaso, de la irrupción de Vox en el parlamento andaluz no es responsable la propia Susana Díaz? ¿Acaso el ascenso de Vox no es consecuencia natural también de la existencia de Podemos?
Indignación he sentido también al escuchar los llamamientos de la extrema izquierda comunista para que la gente tome la calle ante los resultados habidos. ¿Es que los votantes de las opciones del centro y la derecha no son válidos? ¿Existe supremacía moral también a la hora de depositar el voto en la urna? ¿Hay más de 400.000 andaluces que por votar a Vox no merecen ser andaluces? Me parece increíble. Recuerdo que España es un estado social y DEMOCRÁTICO de derecho.

Por lo demás, estos resultados nos han dejado un panorama con más partidos pero distribuidos en la política de bloques de siempre. Ojalá nos sirva para avanzar y progresar. (también en el arte de la palabra).